A mi amigo Luis Roberto, porque la amistad es el mejor escudo en la vida.
Hoy en mis líneas solo encontrarán pedazos de alma que se escapan en cada palabra, en cada movimiento de la mano que escribe, en cada porción de tinta que se tatúa en esta página en blanco. Hoy no hay una musa de por medio, la muy traviesa se fue de vacaciones, y en su viaje se enamoró de un poeta loco, también enamorado, pero de una estrella. Tomó el primer tren hacia el arcoiris hace algunas tardes, se cansó de mi gris perenne, de mi cielo nublado, me dejó sola, aparentemente a medias, y con un montón de ideas atrapadas en el intangible mundo de mis pensamientos, ideas con ganas de vivir que revoloteaban en mi pecho sin saber como salir. Hasta que esta tarde mi principito; no el proveniente de otro planeta que ama a su rosa y tiene cabellos rubios, que también es para mi un ser magistral, me refiero hoy a mi principito del planeta tierra que tiene una cualidad muy especial: ¡es mi amigo! Y como buen amigo siempre acude a rescatarme cuando la tormenta es lo suficientemente poderosa como para resumirme a la completa incertidumbre de mi ser, llega poniendo mis neuronas a imaginar el olor del silencio o llenando de esperanza mis pulmones cuando no consiguen respirar. Esta tarde en particular llegó para destrabar el nudo de letras que me sofocaba y para recordarme que escribir va mucho mas allá de palabras hermosas y que se puede hacer poesía de la que ¨eriza la piel¨ de la historia menos esperada y, gracias a él me entraron estas ganas locas de sentarme a escribir y ver que sale de este deseo valiente:
Hoy transito por caminos escabrosos, hoy a mis alas les cuesta mucho volar, hoy le temo más de lo normal al tiempo y busco fuertemente refugio en mi soledad. Hoy respiro sueños con miedo a ser libres, reprimo emociones y aunque con deseos no consigo llorar.
Pero eso solo será hoy, mañana me despojaré de mis ataduras, daré rienda suelta a mi cuerpo para su búsqueda de la libertad, llenaré mi sangre de esperanza y encima de una de mis nubes grises lograré conquistar, cada rincón de mi cielo, cada silencio de mi corazón, cada amistad que se me pierda….. Para luego desterrar cada engaño disfrazado de ilusiones, cada mentira dañina, cada miedo sin base, cada pesimismo criminal….
Cuando las palabras se vuelven torpes para describir… se sabe que simplemente no se logrará cometido…y es ahí cuando me refugio en tu «gris» para resumir en un color lo que representas en mi vida…
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Gracias solo eso me queda decirte gracias por dar valor a mi gris y por ser ya parte de lo que soy
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